Qué hacer si tienes una inspección fiscal

Recibir una notificación sobre una inspección fiscal puede ser una experiencia estresante. Este proceso es una revisión de tus obligaciones tributarias para garantizar su correcto cumplimiento. En este artículo, te explicamos cómo actuar y prepararte para una inspección fiscal, minimizando riesgos y evitando problemas con Hacienda.

¿En qué consiste una inspección fiscal?

Una inspección fiscal es un procedimiento que realiza Hacienda para verificar que cumples con tus obligaciones tributarias. Este proceso puede abarcar tanto a personas físicas como jurídicas, dependiendo del tipo de revisión.

Podemos diferenciar dos tipos de inspección fiscal:

  • Inspecciones generales: revisan la totalidad de tu actividad económica
  • Inspecciones parciales: analizan aspectos concretos de tus declaraciones fiscales

¿Qué puede motivar recibir una inspección fiscal?

Hacienda selecciona los casos según determinados criterios. Algunos comunes pueden ser:

  • Discrepancias en las declaraciones tributarias
  • Denuncias o reclamaciones de terceros
  • Operaciones consideradas inusuales o sospechosas

Identificar el motivo de la inspección puede ayudarte a preparar mejor la documentación solicitada.

¿Qué hacer al recibir una notificación de inspección fiscal?

Mantén la calma y revisa la notificación cuidadosamente

El primer paso es leer detenidamente la notificación de inspección fiscal para comprender su contenido. Este documento suele incluir:

  • Identificación del contribuyente: asegúrate de que los datos personales o empresariales sean correctos.
  • Motivo y alcance de la inspección: determina si abarca ejercicios fiscales completos o aspectos concretos de tus declaraciones.
  • Documentación requerida
  • Plazo de cumplimiento.

Contacta con un asesor fiscal o abogado especializado

Un asesor fiscal o abogado experto en materia tributaria puede marcar la diferencia durante este proceso. Sus servicios pueden incluir:

  • Interpretar el contenido de la notificación y explicarte los términos más técnicos.
  • Ayudarte a preparar y presentar la documentación requerida de manera correcta.
  • Representarte durante la inspección si decides delegar la interacción con Hacienda.

En Agustí & Asociados contamos con un departamento especializado, lo que evitará posibles errores.

Reúne la documentación necesaria de manera organizada

Hacienda suele solicitar diversos documentos que justifican tus operaciones económicas y fiscales. Es fundamental reunirlos de manera ordenada y completa.

Entre los documentos solicitados se pueden incluir declaraciones de impuestos, facturas emitidas y recibidas, justificantes de ingresos y gastos, registros contables o contratos relacionados con tu actividad.

Organizar estos documentos por categorías facilitará el proceso y reducirá el tiempo de revisión por parte de Hacienda. Además, evita proporcionar documentos no solicitados para prevenir interpretaciones erróneas.

Cumple estrictamente con los plazos establecidos

El incumplimiento de los plazos indicados en la notificación puede traer graves consecuencias, como sanciones adicionales o una actitud más estricta por parte de Hacienda. Sigue estas recomendaciones:

  • No postergues la preparación: inicia el proceso tan pronto recibas la notificación.
  • Solicita prórrogas si es necesario: si no puedes reunir toda la documentación a tiempo, puedes pedir una extensión justificando la necesidad.
  • Entrega todo dentro del plazo establecido: preferiblemente, realiza la entrega de forma presencial o mediante un sistema telemático con acuse de recibo.

Cómo actuar durante la inspección

Sé transparente y coopera activamente

La transparencia es fundamental durante una inspección fiscal. Asegúrate de proporcionar únicamente la información que te soliciten y hazlo de manera clara y ordenada. La falta de colaboración o la opacidad podrían interpretarse como un intento de ocultar información, lo que puede agravar la situación.

Evita declaraciones espontáneas o innecesarias

Responder únicamente a las preguntas planteadas por el inspector es crucial para no complicar el proceso. Hablar más de lo necesario puede abrir la puerta a nuevas revisiones o generar dudas innecesarias sobre otros aspectos de tu actividad fiscal.

Si desconoces algún dato, indica que necesitas consultarlo y ofrece entregarlo posteriormente. En este punto recordamos la importancia de contar con un asesor fiscal al que puedas remitir las dudas planteadas.

Solicita un acta de la inspección y revisa su contenido

Al finalizar la inspección, es habitual que el inspector elabore un acta con las conclusiones y observaciones sobre tu situación fiscal. Este documento es esencial, ya que establece:

  • Los hechos comprobados, detalla las irregularidades detectadas o confirma que está todo en regla.
  • Propuestas de regularización en caso de que existan ajustes necesarios.
  • Plazo para alegaciones en caso de desacuerdo.

Lee el acta detenidamente antes de firmar y, si detectas errores, puedes solicitar una corrección o incluir tus observaciones en el apartado correspondiente.

Posibles sanciones y cómo evitarlas

Las sanciones que impone Hacienda cuando detecta irregularidades en tus obligaciones fiscales varían según la naturaleza y gravedad de las infracciones.

Sanciones leves: errores menores en las declaraciones

Estas sanciones pueden aplicarse cuando los errores son involuntarios y no implican una intención de defraudar. Dentro de estos casos se pueden incluir la declaración de un importe incorrecto debido a un cálculo erróneo.

Se pueden evitar estas sanciones revisando las declaraciones exhaustivamente antes de presentarlas, utilizando herramientas de software contable o contando con un asesor especializado.

Sanciones graves: declaraciones incorrectas con intención de ocultar información

Estas sanciones ocurren cuando Hacienda detecta que el contribuyente omitió información relevante de manera deliberada, por ejemplo no declarar ingresos obtenidos o presentar facturas falsas para reducir la base imponible.

En estos casos, las multas oscilan entre el 50% y el 100% de la cantidad no declarada, dependiendo de las circunstancias agravantes o atenuantes.

Sanciones muy graves: fraude tributario o uso de medios fraudulentos

Estas infracciones se refieren a intentos claros de evadir impuestos mediante estrategias ilegales, como crear estructuras ficticias para reducir la carga fiscal, o manipular libros contables.

Estas sanciones, además de multas superiores al 150% del importe defraudado, pueden incurrir en responsabilidades penales si el fraude supera los 120.000 euros.

Otras consecuencias de las sanciones fiscales

Además de las multas, se pueden añadir intereses por el tiempo transcurrido desde el incumplimiento. 

Además, en casos graves, el contribuyente puede quedar excluido de ayudas o subvenciones.

 

Una inspección fiscal no tiene por qué ser un problema si estás bien preparado. Actuar con calma, contar con un asesor fiscal especializado y cumplir con los plazos puede marcar la diferencia.

Si necesitas ayuda profesional, en Agustí & Asociados estamos a tu disposición para proteger tus intereses y garantizar el cumplimiento de la normativa fiscal.